Las escaleras tenían unos azulejos muy bonitos.
Las monitoras y los visitantes del museo se han quedado asombrados de todas las cosas que sabíamos de Sorolla y sus cuadros:
Nos han enseñado los pinceles y las pinturas que usaba Sorolla, teníamos que buscar cuadros de paisajes, cuadros de retratos...Y con nuestros dedos mágicos.. ¡hemos pintado! Usamos el pulgar, que es más gordito, para pintar la arena de la playa y el mar del cuadro "Paseo a orillas del mar". Pero para pintar cosas más pequeñas usamos el meñique, que es como un pincel finito.
¡Qué bonitas las mariposas! Nos han contado que Sorolla se fijaba en los colores de las mariposas para hacer sus cuadros.
En el cuadro "La bata rosa" si observábamos bien, veíamos el mar..
Este es uno de nuestros cuadros favoritos "El baño del caballo". Sorolla pintó un caballo que acababa de bañarse y sale todavía con su piel mojada del agua. Nosotros creemos que se había llenado todo de arena, por eso se tuvo que lavar.
En "La siesta", Sorolla utilizó mucho el color verde y nos han contado que en el cuadro se ve un poquito de una cuna de bebé, ¿la encontráis?
Hemos subido al piso de arriba de la casa por unas escaleras de madera.
En el piso de arriba había una exposición de trajes regionales y cuadros de Sorolla:
¡Era divertido buscar los trajes dentro de los cuadros!
Ha sido todo muy emocionante, nos hemos portado fenomenal y
¡hemos montado en autobús!
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